1 ago 2010

Crónicas de un día inolvidable...

Ayer 31, era el cumpleaños de mi amiga de toda la vida.
Un amigo que tenemos en común ella y yo, había pensado que era una buena idea, que la llamara por teléfono el cantautor Marwan.
En principio estaba difícil o eso me pareció a mí... pero a medida que pasaban los días, vi que era posible...

Mi amiga hacía un par de semanas que había comprado unas entradas para ver a Berto en "La apoteosis necia" en el teatro Victor Jara. Así que la vería a media tarde.
Y si la llamaba Marwan, me lo contaría en persona con todo lujo de detalles.

Yo le mandé un mensaje de texto a las doce en punto para felicitarla. Pero también la llamé para ultimar todos los detalles de la hora y lugar de encuentro.

Sobre las 5:30 de la tarde, salí de mi casa a toda prisa para comprarle a mi amiga un detallito. (Si, es culpa mía por dejarlo todo en el último momento...)
Fuí a "Bijou Brigitte" y con la ayuda de una dependienta, elegí una pulsera bastante mona en color azul.
Yo como una fánatica que soy de los pendientes, decidí llevarme unas dormilonas en forma de flor, imitando el nácar y con una piedrita brillante en medio.
Pasé por caja y me fui en taxi a casa de mi amiga.

Me dió tiempo de subir y sentarme un poco, mientras esperábamos a su hermana, que era la que nos llevaría al centro comercial de Vecindario.
Aproveché el momento para darle la pulsera... pero para mi sorpresa, no le gustó.
Yo quería que la tierra me tragara, pero friamente pensé en los pendientes.
Le quité el precio, se los enseñé y le gustó.
Así que yo me quedé con la pulsera y ella con las dormilonas.

Su hermana vino a por nosotras y de camino al centro comercial, mi amiga mencionó que tenía una llamada perdida de un número que no conocía.
Yo me puse muy nerviosa, porque pensé que sería la tan ansiada llamada de Marwan...

Una vez que llegamos a destino y viendo la hora que era, le dije a ella que me dejara el móvil, que yo averiguaría quien la había llamado.
Me dió señal, pero no lo cogía nadie.
Pero en un nuevo intento, volví a llamar al mismo número y escuché su voz.
No recuerdo ni que le dije, pero inmediatamente le pasé el teléfono a mi amiga, que con cara de alucinada no dejaba de sacudir la mano y de dar vueltas sobre si misma.
Estaba loca de contenta y yo emocionada de verla feliz. Fué un momento increible.
¡No se lo podía creer!

Nuestra intención era ir a cenar algo y después ir al teatro. Aún era temprano y nos daba tiempo de dar una vuelta a mirar cosillas.
Después fuimos a un local de montaditos a comer algo.
Mi amiga de la emoción, no podia ni comer.
Se estaba muy a gusto allí, hasta que vi a un "señor" gritarle a la camarera. A mi se me ocurrió advertirle, que la comida se pedía en el mostrador. Y no se le ocurrió otra cosa que acercarse a nosotras y ponerse a hablarnos. El hombre estaba muy borracho y se puso bastante pesado.
Yo con la cabeza le hacía señas al camarero, pero no había manera.
Nos tomamos el resto que quedaban en los vasos y nos fuimos.

Seguimos divagando por el centro, hasta que nos sentamos de nuevo en otro local.
Mi amiga se tomó una Coca - cola y yo un vodka con red bull.
Y empatamos la hora con irnos por fin al teatro. Pillamos un taxi, con tan mala suerte, que mi amiga antes de entrar en el coche, pisó un pequeño bache y se torció la pierna.
Le dolía bastante y ya se temía lo peor, porque hacía poco había tenido una fisura en el mismo sitio. Y encima el taxista era muy borde. Probablemente se enfadó, porque el centro comercial quedaba bastante cerca del destino.

Una vez dentro no cabía un alma y hacía un calor terrible.
Pero puedo decir que me reí todo lo que quise. Hacía muchísimo tiempo que no me reía tanto.

Y pese a que mi amiga por último se quedó algo fastidiada por la pierna, sé que fue un día radiante para ella. Y que jamás olvidará que la llamó el día de su cumpleaños, uno de sus cantantes favoritos... por no decir el que más.

Gracias a Jesús, por conseguir que Marwan la llamara.
Gracias a tí Carmen, por contar conmigo y por ser como eres.
Y aunque no lo lea... gracias a tí Marwan, por hacer feliz de esa manera a una persona.

Besos con sabor a... los sueños se hacen realidad!

3 comentarios:

  1. Qué bonito!
    Fue un día perfecto, a no ser por el pequeño traspiés! ;-)

    Gracias a los 3, sois unos soles!

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  2. Nada, lo que sea por mis niñas :-) Me costará superarlo ;-) algo se me ocurrirá :-D Besis.

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  3. Muchas veces los sueños se hacen realidad ;-)

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