23 mar 2015

Y sigo pensando, para no variar...

Tengo la mala costumbre de pensar demasiado en las cosas, tanto buenas como malas y todo me afecta porque no sé separar lo que importa y lo que no merece la pena. Sigo pensando que si tuviera una varita mágica, todo sería un poco mejor.

No me creo una persona especial, ¿pero cuántas veces han pensado ustedes en acabar con las injusticias? ¿Y con la pobreza y el hambre? ¿Con el machismo, racismo, xenofobia? ¿Y con los corruptos?. Yo acabaría con todo eso. A eso me refiero.

¿Pero hace falta magia para eso?

Y también...

¿Por qué cuando decimos, nos tomamos un café y nos ponemos al día? Pues ese pequeño gesto se nos olvida o no nos preocupamos para que eso suceda. “Bueno, si él o ella no llama, yo tampoco” .
Y a veces es dar el paso, simplemente.

¿Por qué nos enfadamos? Cuántos malos entendidos, cabezonería, orgullo... con lo fácil que es ceder de vez en cuando. Quizás te enfades y no vuelves a ver a esa persona. Sería triste, ¿no?

Es curioso que cuando necesitamos a alguien, nos apoyamos en las personas en las que confiamos, cuando estamos bien, pues ni un mensaje, ni un “¿hola, qué tal?
¿Es egoísmo? No sé, igual es eso y yo me equivoco y cada cual va a lo suyo.

¿Y si pusiéramos todos un poco de nuestra parte?

¿Cuánto tiempo hace que no das un abrazo? ¿Un beso? ¿Cuánto hace que no dices “Te quiero”? O ¿me haces sentir bien?



No sé si están de acuerdo, pero considero que soy una de las “pocas” que sigue el al pie del cañón, siempre pendiente de los demás... pero llega un día, uno cualquiera, y dices: ¡¡Hasta aquí!!

No creo que sea tan difícil dedicarle dos minutos de tu tiempo a esa persona que sabes que está ahí, que nunca te falla. Jolines, aún me parece increíble los distanciamientos que hay con tanta tecnología.

Y si, últimamente casi sin querer quiero respuestas a tanta indiferencia, a tanto descuido. De que los días pasen y no ocurra nada extraordinario...

Señores, estamos aquí de prestados. La vida, son tres días y uno está lloviendo. ¡Ahí lo dejo!


Besos a... interrogantes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario