Diferente es que no tengas
ganas de hacer nada y de repente te llega un WhatsApp diciendo que si quieres
quedar para tomar algo.
Felicidad en estado puro es
verle y sentirme viva. Ilusiones renovadas.
Quien lo diría, ¿eh?. A estas alturas de la vida...
Ducha… calor… llego tarde…
dos besos… risas… Nestea frío… hablar… recordar... ir de tiendas… te queda bien ese color... ¿cambio de look?... taxi… ¡hola!...
ordenador… + risas… cerveza… WhatsApp… vídeos… de vuelta…
dueño de la casa… pago del alquiler… hablar… ¿quieres un gato?... mandar fotos…
mimos para el gato… hablar con una amiga… dice que sí :D… emocionarme… cenar…
seguir hablando… FB… televisión… y a la camita.
Ojalá todos los días fueran
la mitad de buenos y bonitos como este.
Agradezco “a mi niño” que esté ahí pese a la lejanía
que ahora mismo nos separa. ¡Gracias por alegrarme los
días! :D
¡Gracias, Carmen! Por acompañarme y por hacer de
este día diferente. Me alegro por todo en general… y lo sabes.
¡Gracias, Sory! Porque pese a las horas que nos
pegamos al teléfono, tú haces que parezcan minutos. Y aunque no te lo creas,
siempre se me quedan cosas en el tintero jajajaja. (Oye, dile a la gata que te
deje hablar tranquila) :P
Estoy muy contenta, porque el
destino quiso que yo tentara a la suerte y le preguntara a mi casero si quería
un gatito. Y por suerte, mi pequeño Pispito tendrá un nuevo hogar.
Así que esa es la “guinda” que
corona este día tan diferente y lleno de sorpresas.
Besos con sabor a… felicidad
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